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POLITICA // PLAYERS
Martes 25 de octubre de 2011 | 17:22
"Yo creo en Carlitos Tévez. Lo queremos en Argentina" fue el twit que el gobernador bonaerense Daniel Scioli posteó hace unos días y que dejó salir a la luz algo que se venía cocinando por lo bajo. Se sabe que el funcionario es muy allegado al futbolista y que de esa amistad resultaron muchas obras en conjunto para los vecinos de Fuerte Apache, la zona de la cual es oriundo el jugador, pero ahora hay algo más.
El periodista Gustavo Sylvestre relató en su blog "política y actualidad" un encuentro que prendió la alarma de Mauricio Macri. El sábado pasado Daniel Scioli estuvo jugando al fútbol con el actual presidente xeneize, Amor Ameal, y aprovechó la oportunidad para contarle lo molesto que estaba por el trato que los británicos le dieron a Carlos Tévez. Indignado, el gobernador le propuso a Ameal una jugada política para resolver el conflicto y sumarse votos en las elecciones: repatriar a Tévez.
Esta situación llegó a los oídos del jefe porteño Mauricio Macri y no le agradó mucho la noticia. El líder del PRO justamente está en tratativas para volver a captar espacio en la dirigencia del club que por tantos años supo tenerlo como presidente y claramente la idea de Scioli, de meter las narices en Boca, no le gusta. Según el mismo blog hasta hubo una charla entre ambos luego de las elecciones generales y hasta se hicieron un pase de facturas.
Este enredos de manejos por ver quien logra volver a traer a Tévez a la Argentina se da en medio de un contexto más que complicado para el jugador. No solo los hinchas ya quemaron sus camisetas y hasta prendieron fuego un muñeco que lo representaba sino que además el club anunció que no pagará el salario del mes próximo. Por otra parte Tévez se entrena en solitario ya que el Manchester City le abrió un expediente disciplinario al jugador y lo apartó del equipo
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